Bélgica tiene una de las filatelias más bonitas y variadas del mundo, en el más amplio sentido del juicio. Es histórica, artística, apasionante como la que más. Y con una categoría suprema, en cuanto a la calidad de los sellos, tanto en su diseño, grabado e impresión, como en la regularidad incesante de la misma, desde sus primeras emisiones en 1849 hasta las más recientes y actuales.
Y es que el nivel de los distintos diseñadores y grabadores que han creado la gran
filatelia de Bélgica a lo largo del último siglo y medio, siempre ha
rayado a una altura muy notable, cuando no y la mayoría de las veces, superior.
Hoy día, varios diseñadores y un solo grabador, invitados puntuales aparte, dan
continuidad a esta filatelia, ahora como antaño, bella e irresistible. El
grabador aludido es Guillaume Broux, que debutó a finales de los años
ochenta y que, desde entonces y hasta hoy mismo, y sobre todo a partir de su docena
de maravillosos retratos de los reyes de Bélgica, creados entre 1998
y 2001, es omnipresente en
prácticamente todas las grandes emisiones calcográficas belgas.
Bélgica,
1997. Día del Sello, que homenajea a Constant Spinoy. Diseño de Myriam Voz y
Thierry Martin (MVTM). Huecograbado y calcografía
Nació Guillaume Broux el 24 de enero de 1963
en Tongere, una pequeña localidad situada cerca de Lieja y famosa por su
espléndida basílica. Estudió humanidades en Hasselt, al norte de
Bélgica, y enseguida acudió a varios institutos y talleres artísticos a
terminar de dominar el difícil arte del grabado. Y las pocas notas biográficas
más que se conocen sobre su formación, inciden en que se desplazó a Estocolmo,
durante sus primeros tiempos en el grabado a buril, a recibir unas cuantas
lecciones magistrales de Czeslaw Slania, experiencia que, de más está
decirlo, sería la mejor enseñanza y afianzamiento posibles de cara a trazar una
brillante y próspera carrera en el mundo de la filatelia.
Y las pocas notas biográficas más que se conocen sobre su formación, inciden en que se desplazó a Estocolmo, durante sus primeros tiempos en el grabado a buril, a recibir unas cuantas lecciones magistrales de Czeslaw Slania, experiencia que, de más está decirlo, sería la mejor enseñanza y afianzamiento posibles de cara a trazar una brillante y próspera carrera en el mundo de la filatelia.
Bélgica 1998-2001, Reyes belgas. Leopoldo I, rey de
Bélgica entre 1831 y 1865; Leopoldo II, rey de Bélgica entre 1865 y 1909; y Alberto I, rey de Bélgica entre 1909 y 1934. Retratos grabados
por Guillaume Broux. Calcografía y huecograbado
Bélgica 1998-2001, Reyes belgas. Leopoldo III, rey entre 1934 y 1951; Balduino,
rey entre 1951 y 1993; y Alberto II, rey de Bélgica entre 1993 y 2013. Retratos grabados por Guillaume Broux. Calcografía y
huecograbado
Esta gran serie, como reseñábamos, brilla todavía hoy, veinte años después de comenzar a grabarla, como quizá su mejor obra filatélica. Son doce grandes sellos, de tamaño, diseño y hechuras, todos grabados a buril por Broux con una elegancia precisa y justa.
Bélgica 1998-2001, Reyes belgas. Luisa María de Orleans, reina consorte
entre 1832 y 1850; María Enriqueta de Austria, entre 1865 y 1902;e Isabel
Gabriela de Baviera, entre 1909 y 1934. Retratos
grabados por Guillaume Broux. Calcografía y huecograbado
Todos los reyes de Bélgica, además y por
coincidencia histórica desde la independencia en 1830, lo son también de su filatelia, desde el primero,
Leopoldo I, hasta el último del momento en que fue emitida la serie, Alberto II.
Bélgica 1998-2001, Reyes belgas. Astrid de Suecia, reina consorte entre
1934 y 1935; Fabiola, entre 1960 y 1993; y Paola, entre 1993 y 2014.
Retratos grabados por Guillaume Broux. Calcografía y huecograbado
Entre medias de esta serie capital de los reyes, Broux también grabó la emisión que
conmemoraba el 150 aniversario del primer sello belga (1849-1999), igualmente a
partir del diseño de Myriam Voz y Thierry Martin (MVTM).
Bélgica, 1999, 150 aniversario del primer sello
belga. Sellos diseñados por Myriam Voz
y Thierry Martin (MVTM), y grabados por Guillaume Broux.
Calcografía y huecograbado
Durante los mismos años que Guillaume Broux grabó los doce grandes
retratos de los reyes de la filatelia de Bélgica (1998-2001), también
dibujó y grabó a Alberto II para la serie básica, que fue impresa en
diversos valores en los años sucesivos mediante huecograbado y, dos de los
faciales altos, en calcografía. El diseño general de la emisión corrió a cargo
de Myriam Voz y Thierry Martin.
Bélgica, 2000, Rey Alberto II de Bélgica. Dos de los valores de la serie impresos en
huecograbado y calcografía, respectivamente. Sellos que dibuja, a la izquierda,
y graba Guillaume Broux. Diseños de Myriam Voz y Thierry Martin
Sobre estas líneas podemos ver un sello de cada una de esas categorías artísticas y de impresión citadas, acuarela probablemente y grabado aquéllas, ambos retratos obra de Broux. Y es curioso que, siendo un maestro contrastado en los retratos, no se decante abiertamente Broux por esta faceta concreta en cuanto a su preferencia temática se refiere como, en cambio, sí lo hacen otros grandes artistas filatélicos, y no hay más que citar hoy los casos de Sverre Morken, Yves Beaujard o Lars Sjööblom.
Además de estos retratos de Alberto II, sumamos tras estas palabras, un espléndido grabado del político Jean Rey (2002) y uno de los valores de la serie básica de Luxemburgo (Gran duque Enrique, 2001-2003), con otra soberbia talla de Broux; ya que, y respecto a la última instantánea, es una imagen promocional de Bpost y en la que sólo suponemos, a falta de contrastar este dictamen presentido con los diez sellos reales (Premios Nobel belgas, 2016), otra exhibición del grabador belga a partir de los dibujos a tinta china del artista francés Thierry Mordant. Emisión esta última, impresa en calcografía y huecograbado, diseñada por Myriam Voz.
Sorprende la naturalidad de Guillaume Broux en los retratos, pues pareciera, no tanto como que adopte una frugalidad causada por la indiferencia o por la cautela, cuanto que precisa de poca exploración psicológica para captar de inmediato, y con unos trazos ora incisivos y agudos, ora discretos y sutiles, la índole latente del personaje. Exquisito Broux.
Sorprende la naturalidad de Guillaume Broux en los retratos, pues pareciera, no tanto como que adopte una frugalidad causada por la indiferencia o por la cautela, cuanto que precisa de poca exploración psicológica para captar de inmediato, y con unos trazos ora incisivos y agudos, ora discretos y sutiles, la índole latente del personaje. Exquisito Broux.
A
la izquierda, el político Jean Rey (Bélgica, 2002, impresión
calcográfica sin dentar); diseño del sello de Myriam Voz y Thierry Martin
(MVTM), y retrato grabado por Guillaume Broux. En el centro sobre estas líneas,
el Gran duque Enrique de Luxemburgo grabado por Broux, en uno de los valores
emitidos entre 2001 y 2003, impreso asimismo en años posteriores con otros
faciales. Y a la derecha, hojita de Premios Nobel belgas
emitida en 2016, con los retratos de Thierry Mordant y diseño general de Myriam
Voz, todos grabados por Guillaume Broux; impresión mixta en huecograbado y
calcografía
Año 2009. Patrimonio mundial
belga
Si tuviera que elegir unos sellos de los que me siento especialmente
satisfecho, sin duda escogería la serie de 2009 del Patrimonio mundial belga, decía Guillaume Broux en una entrevista concedida en 2016. No sé, simplemente me gustó el conjunto. Me entendí muy bien con el
diseñador, Jean Libert, y quedé muy contento con mis grabados y sobre todo con
el total, que es muy armónico y sugestivo. Lo ideal para mí es diseñar lo que
voy a grabar, pero si no es así, no importa demasiado, pues me entiendo muy
bien con los diseñadores y los artistas. Hablo a menudo con ellos e
intercambiamos pareceres y contrastamos ideas.
Patrimonio mundial belga, 2009, Bélgica. Diseño de Jean Jilbert (nacido
en 1954) y grabados de Guillaume Broux. Hojita sin dentar. Impresión mixta en calcografía y huecograbado
En mi juventud no pensaba yo expresamente dedicarme al grabado de sellos,
fue algo, no exactamente accidental, pero sí que tuvieron mucho que ver las
circunstancias del momento, aseguraba Broux en esa entrevista
reseñada. Digamos «que me vinieron a buscar». Yo tenía
desenvoltura para grabar casi sin habérmelo propuesto demasiado en serio. Mi
padre tallaba madera y hacía muebles en Lieja, quizá aquí está el origen de
esta habilidad mía…
Mis primeros años de relación con el Correo belga fueron a título privado, rememora Broux, y sólo a partir de 1993 me incorporé en Malinas al organigrama artístico. Desde entonces estoy dedicado a ello por entero, y puedo decir que con gran reconocimiento.
Mis primeros años de relación con el Correo belga fueron a título privado, rememora Broux, y sólo a partir de 1993 me incorporé en Malinas al organigrama artístico. Desde entonces estoy dedicado a ello por entero, y puedo decir que con gran reconocimiento.
Patrimonio Mundial de la
Unesco, Bélgica, 2009. Casas del arquitecto Víctor Horta (1861-1947), en
Bruselas, y, a la derecha, Centro histórico de Brujas. Sellos diseñados por Jean Jilbert y grabados por Guillaume Broux. Calcografía y huecograbado
Respecto a su método de trabajo, Broux indica que entra dentro de las
coordenadas normales del grabado a buril. Desde luego dominar el dibujo con
los ojos cerrados es imprescindible, eso para empezar, cuenta el grabador. Y
luego es necesaria una gran concentración en el momento de ponerse a grabar.
Generalmente yo necesito entre 100 y 150 horas para el grabado de un sello,
dependiendo de la dificultad de la obra, y mi media al año suele ser de unos
doce sellos grabados, aunque en 2009 llegué a grabar 16.
Patrimonio
Mundial de la Unesco, Bélgica, 2009. Minas neolíticas de sílex de Spiennes, en
Hainaut (Bélgica); Museo Plantin-Moretus, Amberes, que honra a los impresores
Christoffel Plantijn y Jan Moretus; y Catedral de Notre-Dame de Tournai. Sellos diseñados por Jean Jilbert y grabados por Guillaume Broux. Calcografía y huecograbado
En cuanto a mis preferencias personales, hombre, puesto a elegir, me
decanto por la impresión calcográfica a un solo color, ya que esto permite una
mayor libertad en el grabado, que puede ser más denso y profundo, explica Guillaume Broux. El diseño, lógicamente, condiciona,
pues sobre todo hoy día, hay que tener muy en cuenta el peso estético del
color. A mayor relevancia del color, más contenido y sencillo ha de ser el
grabado.
Boîtes aux lettres
Entre 2009 y 2011, Bélgica emitió tres series relacionadas, estética y temáticamente, con el correo en sí mismo considerado. Las dos primeras series en el tiempo están dedicadas al transporte del correo, y los cinco sellos de cada una de ellas fueron diseñados por Jean Libert y grabados por Guillaume Broux, siendo impresas ambas, como la que presentamos de inmediato de 2011, en calcografía y huecograbado.
Entre 2009 y 2011, Bélgica emitió tres series relacionadas, estética y temáticamente, con el correo en sí mismo considerado. Las dos primeras series en el tiempo están dedicadas al transporte del correo, y los cinco sellos de cada una de ellas fueron diseñados por Jean Libert y grabados por Guillaume Broux, siendo impresas ambas, como la que presentamos de inmediato de 2011, en calcografía y huecograbado.
Buzón de hierro fundido de la segunda mitad del siglo XIX y, a la
derecha, buzón belga de los años treinta del siglo XX, grabados por Broux, con
la colaboración de Mörck en el segundo sello
Esta serie de 2011, que exponemos entera y que originariamente fue
emitida en una hojita que contenía dos ejemplares de cada uno de los cinco
sellos que la forman, tiene como tema los buzones. Del diseño de la emisión se
encargan Myriam Voz y Thierry Martin, que proponen cinco buzones
de diferentes épocas, unos bellos boîtes aux lettres, aislados y
tentadores.
Buzón "tipo Napoleón", años setenta
del siglo XX; buzón rural de madera de la segunda mitad del siglo XIX; y buzón
belga de Bpost del siglo XXI. Grabados de Guillaume Broux, con la colaboración
de Martn Mörck en el primero de ellos
Guillaume Broux y Martin Mörck, por su parte, circunscritos a la
preponderancia estética de la emisión, realizan unos grabados muy concisos y
esenciales, estrictamente preceptivos. Excelente.
Y añadimos dos de los sellos de la citadas series del transporte del correo de 2009 y 2010, unas emisiones, como esta de los buzones, muy atractivas y coloridas.
Y añadimos dos de los sellos de la citadas series del transporte del correo de 2009 y 2010, unas emisiones, como esta de los buzones, muy atractivas y coloridas.
Citröen de los años cincuenta y camión Volvo del siglo XXI Bélgica,
2009 y 2010
Comunión artística ideal
La comunión entre los distintos artistas implicados en la confección de las emisiones de Bélgica, es realmente inmejorable. Como decíamos en la entrada anterior, además, Guillaume Broux se involucra asimismo en el proceso de diseño, e incluso en la propia y primera gestación de la emisión.
La comunión entre los distintos artistas implicados en la confección de las emisiones de Bélgica, es realmente inmejorable. Como decíamos en la entrada anterior, además, Guillaume Broux se involucra asimismo en el proceso de diseño, e incluso en la propia y primera gestación de la emisión.
El vuelo a través de los tiempos, viejos
aviones belgas. Bélgica, 2016. Dibujos de Jan De Maesschalck y diseño general
de Kris Maes. Impresión combinada en huecograbado y calcografía
En esta hojita de 2016, participan, aparte de Broux, que graba
uno de los sellos, el diseñador Kris Maes y el prestigioso artista belga
Jan De Maesschalck (Sint-Gillis-Waas, 1958), que crea una bella
composición de una sola vez, probablemente a la acuarela, sobre viejos aviones
de Bélgica. Emisión impresa en huecograbado, excepto el sello central de
la hoja, al que se añade el relieve calcográfico tallado por Broux.
Los aviones no son tan fáciles de grabar como parece, aseguraba Guillaume Broux al presentar esta emisión de 2016. Hay que ser muy conciso, más que en el propio grabado, en el mismo diseño previo. No se puede uno separar de los contornos precisos, que a veces no son sino una simple línea. De Maesschalck me dejó el avión más viejo y destartalado, ja, ja, ja… Es una hojita muy equilibrada y todos hemos quedado muy satisfechos. ¿Grabarla entera? Bueno, eso hubiera requerido casi un año de trabajo arduo…
Los aviones no son tan fáciles de grabar como parece, aseguraba Guillaume Broux al presentar esta emisión de 2016. Hay que ser muy conciso, más que en el propio grabado, en el mismo diseño previo. No se puede uno separar de los contornos precisos, que a veces no son sino una simple línea. De Maesschalck me dejó el avión más viejo y destartalado, ja, ja, ja… Es una hojita muy equilibrada y todos hemos quedado muy satisfechos. ¿Grabarla entera? Bueno, eso hubiera requerido casi un año de trabajo arduo…
Biplano de Léon de Brouckère, único
sello de la emisión que graba Guillaume Broux
De Maesschalck ha participado durante los últimos años en otras
emisiones igualmente atractivas. Así, por ejemplo, en la de Verdi de 2013,
que Broux rubricó con algunos grabados, o en las de 2009 y 2010,
dedicadas, respectivamente, a compositores y escritores.
De izquierda a derecha, Guillaume Broux, el
prestigioso diseñador Kris Maes y el artista francés Thierry Mordant, que ha
diseñado asimismo varias emisiones para Mónaco y que “puso” los dibujos que el
primero grabó en la serie belga de los Nobel anteriormente expuesta (2016)
Un año antes, en 2015, Broux grabó uno de los cinco sellos de la impresionante y bella hojita que conmemoró el bicentenario de la mítica batalla de Waterloo, diseñada por Kris Maes. En esta gran emisión, grabaron los otros sellos Martin Mörck, Elsa Catelin, Wolfganag Mauer y Jiang Weijie.
En
la emisión de Waterloo de 2015, Guillaume Broux grabó a buril el retrato de Guillermo
II de los Países Bajos (1792 - 1849), que fue el comandante de las fuerzas
belgas y holandesas en la batalla de Waterloo. Se inspiró Broux en el retrato
del rey del artista Charles Pièrre Verhulst (1774-1820), a la izquierda
Y por último, exponemos otras dos grandes emisiones de los últimos años, ambas
realmente espectaculares, que Guillaume Broux ha incidido con su verbo tenaz y riguroso: la
de Andreas Vesalius (1514-1564), emitida conjuntamente por Bélgica y Portugal (2014), con
diseño de Kris Maes; y la segunda de 2017, dedicada a mostrar algunas máscaras africanas del Museo Real de África Central (Bruselas, Parque de Tervuren), a
partir de la concepción general del estudio Luc Derycke.
A la izquierda, emisión conjunta entre Bélgica y Portugal (2014) dedicada a
Andreas Vesalius (1514-1564) a los 500 años del natalicio; diseño de Kris Maes
y grabado de Guillaume Broux, y a la derecha, hojita de las máscaras africanas
(Bégica, 2017), diseñada por el Estudio Luc Derycke y con grabados de Broux (imagen
esta última promocional de Bpost). Impresión mixta de ambas hojitas en
calcografía y huecograbado
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