Una
belleza rápida y directa, incomprensible y sin disertaciones. Así es la belleza
verdadera, y nada más es necesario
Marcel
Proust, Los placeres y los días
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En su inmensa riqueza, en la filatelia francesa también abundan las paradojas afortunadas. Charles Mazelin es una de ellas, contemplada ahora su trayectoria en el ámbito huraño y apasionante del sello grabado. Como Eugène Lacaque, Mazelin llegó con muchos años al mundo del sello, más cerca de los sesenta que de los cincuenta, y así y todo, recorrió un camino tan largo como fructífero.
Es Mazelin, y en esto también emparenta con Eugène Lacaque, y con
otros artistas franceses como Jules Piel, Jean Pheulpin o Achille Ouvré, un
grabador muy discreto y delicado, de una finura realista y exquisita, o lo que
es lo mismo, lírica y sosegadamente clásico. Una elegancia morosa y reservada es
el estilo que Mazelin ha tallado pulcramente en todos y cada uno de sus sellos, teselas de un mosaico vivaz y colorido.
Hay un sello de Saar que es el mejor y más indagador autorretrato de Charles Mazelin.
Es este sello de 1954, grabado por el artista en plena madurez. Qué grabado de
Mazelin, y sobre una pintura muy exigente de Albrecht Dürer, impregnado de
intimidad y calma, al tiempo que esmerado y celoso.
Saar, 1954, Arte; sello sobretasado a favor de causas sociales. Virgen y niño con una pera (1512), pintura de Albrecht Dürer, a la izquierda; óleo sobre panel, 49
x 37 cm. Sello diseñado y grabado por Charles Mazelin; calcografía. A la
derecha sobre estas líneas, una prueba final de grabado de Charles Mazelin,
fechada y firmada en junio de 1954, en un color similar al utilizado en la
impresión definitiva
En Los placeres y los días, hay unas palabras de Marcel Proust que son muy apropiadas como sombra escrita en los mejores
sellos de Charles Mazelin. «Había pequeñas
precisiones de sensualidad o de ternura sobre casi nada de las circunstancias
de su vida, y era como un vasto fresco que mostraba la vida sin contarla,
solamente en su color apasionado, de una manera muy vaga y muy peculiar al
mismo tiempo, con una gran potencia conmovedora».
Saar,
1955, Arte; sello sobretasado a favor de causas sociales. Manos rezando,
dibujo a pluma y tinta de Albrecht Dürer. Sello grabado por Charles Mazelin; impresión en calcografía. A la derecha, prueba final de artista de Mazelin
Sólo dos años después del
sello de Dürer, el artista grabó otra pintura igual de ardua y comprometedora.
Pero ahora Mazelin porfía en la interpretación y ofrece un retrato que es muy
otro, aunque siempre, no obstante la vehemencia con que aborda a la bella dama
de Da Vinci, escrito con fiebre y mesura.
Ciertamente,
y entonces con más de 70 años, aquí en estos sellos de Saar de la década
de los cincuenta, está el mejor Mazelin, libre de vanidades y ahíto de
discernimiento, si bien el artista no tiene juventud en la filatelia, sólo destreza y sabiduría.
Saar, 1956, Arte; sello sobretasado a favor de causas sociales. La belle Ferronière, pintura atribuida a Leonardo da Vinci; óleo sobre tabla, 62 x 44 cm, hacia 1495. Sello grabado por Charles Mazelin; impresión en calcografía. A la derecha y a modo de curiosidad y esparcimiento, Cabeza de mujer, grabado con retoques a lápiz por Johannes de Mare (1806-1889) a partir de la pintura de Da Vinci
Saar, 1953, Arte; sello sobretasado a
favor de causas sociales. Niño con pájaro (1625), pintura de Pieter Paul Rubens. Sello calcográfico grabado por
Charles Mazelin, del que se ofrece a la derecha una prueba firmada
Mazelin
tenía un temple singular grabando retratos, ya fuera partiendo de fotografías o
recreando pinturas, y con las damas melancólicas y seductoras tocaba suavemente
sus facciones de una manera muy tenue y melosa. Con este retrato de Juliette
Récamier de 1950, el grabador fue galardonado con el premio al sello más artístico del año en Francia.
Francia,
1950, Juliette Récamier. Sello diseñado por Paul Pierre Lemagny, sobre la
pintura de François Gérard (1805; óleo sobre lienzo, 225 x 145 cm), y grabado
por Charles Mazelin. Impresión en calcografía
Tarde en años, joven en
ilusiones
Charles
Mazelin nació el 14 de febrero de 1882 en Elbeuf, localidad del departamento de
Sena Marítimo, a apenas 20 kilómetros de Rouen, donde vivió más tarde con su
madre, artista dramática que llegó a tener buena fama. De niño el pequeño
Charles no era demasiado aplicado, pero enseguida demostró un gran talento en el dibujo.
A los 15
años, Mazelin ingresó en la Escuela de Artes Decorativas de París, y sólo dos
años después y pese a no conseguir ser muy disciplinado, pudo asistir a la Escuela de Bellas Artes,
donde conoció a Jules Jacquet y Fernand Cormon. «Cuando era muy joven», habría de
recordar Mazelin muchos años después, «fui muy revoltoso y me llegaron a echar
de alguna clase. Pero entonces yo, por miedo de desagradar a mi madre, me iba
con mis cuadernos a algún jardín y me dedicaba a dibujar lo que veía».
Con acuarelas, gouache o al aguafuerte, e
incluso mezclando técnicas de expresión, Charles Mazelin recreó grandes
pinturas de otros artistas antes de empezar a grabar sellos, así en 1937, La
cuna (1765), a la derecha, a partir de una obra de Jean-Honoré Fragonard, a la izquierda
sobre estas líneas
Ya
veinteañero, Charles Mazelin terminó desarrollando sus buenas cualidades
naturales, y en un intervalo de menos de tres años, acabó obteniendo dos veces
el prestigioso Prix de Rome, que le permitió vivir pensionado en la Villa
Médicis de la capital italiana durante los meses siguientes.
Después de volver a Francia y exponer obras de pintura y
grabado en algunos salones y festivales, Mazelin fue movilizado en los inicios de la I Guerra Mundial. Fue herido en Verdún, aprovechó la convalecencia
para ejercitarse con grabados al aguafuerte, en los que acaso pudo entrever por
fin una vereda artística inhóspita y por eso mismo excitante, y acabó recibiendo
la condecoración de la Croix de Guerre por los servicios prestados.
Primeros sellos emitidos por Francia en 1941 grabados por Charles
Mazelin, retrato del escritor Frédéric Mistral y murallas de Aigues-Mortes,
aquél con diseño de Marcel Émile Fabre; impresión en calcografía. Imágenes procedentes de Wikitimbres.fr. Sobre Aigues-Mortes, ya había realizado Mazelin con anterioridad varias acuarelas que pudo tener en cuenta a la hora de fijar el diseño de este sello de 1941
En los años veinte y treinta de la centuria pasada, y antes de
arribar al puerto del sello postal, Charles Mazelin se dedicó a todo tipo de
actividades artísticas, desde los encargos particulares hasta la ilustración de
revistas y libros, pasando por las pinturas y los grabados propios, y con especial predilección
por los retratos, ya fueran con pinceles o con buriles. Y es en 1939 cuando,
animado por Jules Piel, el artista se compromete a grabar algunos sellos, y no
sería sino dos años después cuando se emitió el primero de los más de 90 en que dejó su firma sólo para la Francia metropolitana, sin contar los de Mónaco, Saar, Andorra, los coloniales e incluso alguno de Polonia (1947), todos realizados sin descanso durante las tres décadas siguientes y ya
hasta casi el final de sus días.
En una declaración posterior, Charles Mazelin confesó que «empecé a grabar sellos como un reto, tras ver a mi amigo Jules Piel grabar con tanto nivel de detalle en un espacio tan reducido, y si he de ser sincero y pese a dominar con soltura el grabado a buril, no estaba muy seguro de poder obtener resultados aceptables en aquellos momentos».
Tarde en años y joven en ilusiones, Charles Mazelin encontró
su pequeño espacio ideal. El artista no pudo ser más feliz en los casi treinta
años que dedicó a los sellos. Cada sello era un reto y un placer. Unos días y unos
sellos. Los placeres y los días.
Sellos grabados por Charles Mazelin en 1945 (Catedral
y puerto de Rouen, tras los estragos de la guerra) y 1949 (Sexto centenario del
paso a dominio real francés del Dauphiné; Colegiata de Saint Barnard en
Romans-sur-Isère), este último diseñado por André Spitz; impresión en calcografía. Imagen
del sello de 1949 procedente de Wikitimbres.fr
En una declaración posterior, Charles Mazelin confesó que «empecé a grabar sellos como un reto, tras ver a mi amigo Jules Piel grabar con tanto nivel de detalle en un espacio tan reducido, y si he de ser sincero y pese a dominar con soltura el grabado a buril, no estaba muy seguro de poder obtener resultados aceptables en aquellos momentos».
Algunos
de los sellos metropolitanos franceses que grabó Charles Mazelin a lo largo de casi
treinta años de actividad artística en la filatelia. Sellos de Voltaire (1949),
Robespierre (1950) y Charles Camille
Saint-Saëns (1952),
todos grabados a buril por Mazelin, diseñador asimismo de los dos primeros,
siendo el del compositor, a la derecha, concebido por Paul Pierre Lemagny. El
sello de Voltaire lo diseñó Mazelin tomando como base el retrato de Maurice
Quentin de La Tour. Calcografía
A la izquierda, uno de los primeros retratos metropolitanos de posguerra
diseñado y grabado por Mazelin, sobre una pintura de Joseph
Vivien (1713), este del teólogo y escritor François
Fénelon (1947); impresión en calcografía. Y
a la derecha, sello calcográfico emitido por Francia en 1951 del corsario Robert
Surcouf, diseñado y grabado por Charles Mazelin
a partir de una ilustración de Gustave Alaux;
en el centro sobre estas palabras, reproducción de uno de los proyectos del artista, muy próximo en realidad al diseño finalmente adoptado. Imagen del
sello de Fenelón procedente de Wikitimbres.fr
Unos días
y unos sellos
Pese a incorporarse, pues, siendo un artista veterano, Charles
Mazelin decantó sin pausas una obra filatélica considerable y excepcional,
hasta el punto de que hoy es alabado como uno de los más grandes autores del
sello francés.
Charles Mazelin fue el artista que más sellos de la Francia
metropolitana grabó durante los años del régimen de Vichy (1940-1944), sólo
superado por Jules Piel y por encima de Pierre Gandon. Estos dos sellos del tocado regional de Île-de-France y de Molière fueron emitidos en 1943 y 1944, este último
muy pocas semanas antes de la liberación de París; impresión en calcografía. El sello de Molière fue diseñado por Michel Ciry. Imagen del
sello de 1943 procedente de Wikitimbres.fr. Y a la derecha, Charles Mazelin retrato en un dibujo sencillo por su amigo y colega Pierre Gandon
Sus primeros años como grabador de sellos coincidieron con el
establecimiento del régimen de Vichy, y Mazelin grabó nada menos que cinco
retratos excelentes del mariscal Pétain para emisiones de la Francia
metropolitana, y todos tan logrados o más que los roturados por su amigos Jules
Piel y Pierre Gandon en 1941 y 1942 respectivamente.
Dos
de los retratos que grabó Mazelin de Philippe Pétain, emitidos entre
1942 y 1943, el segundo en tres valores; impresión en calcografía. A la derecha, prueba de un versión
tipográfica grabada por Georges Hourriez y finalmente no emitida sobre el mismo diseño pequeño
que grabó Mazelin en talla dulce
La relación de Mazelin con los colegas que trabajaban para el Ministerio de Comunicaciones (PTT; Postes,
Télégraphes et Téléphones) fue muy estrecha, e incluso terminada la II Guerra Mundial y cuando el
régimen de Vichy era motivo de escarnio y vergüenza, el artista, menos
implicado en su defensa que algunos de sus amigos, llegó a rubricar un sello de
Sarah Bernhardt (1945) que en realidad fue grabado por Pierre Gandon, quien por
momentos vio peligrar su prometedora carrera por mor de las circunstancias
políticas. En los años de la ocupación alemana, Mazelin fue, junto a Piel
y Gandon, el artista que más sellos franceses grabó.
Retratos que en muy poco tiempo diseñó y grabó Charles
Mazelin del mariscal Pétain, ambos emitidos en 1943 (Estado Francés), este del
centro, utilizando en el diseño la fotografía adjunta; impresión en calcografía
Como retrato propiamente dicho es discutible esta aseveración, pero como sello, Charles Mazelin tocó el cielo artístico con el último dedicado a Philippe Pétain, tomando como base el perfil tallado para una medalla por André Lavrillier.
Francia,
1944, Mariscal Pétain. Sello grabado por Charles Mazelin, y cuyo diseño está
inspirado en un perfil de Pétain creado por André
Lavrillier para una medalla, a
la izquierda. Impresión en calcografía
En las últimas semanas del verano de 1944,
tras la caída del régimen de Vichy, se imponía sustituir los sellos de uso
corriente y dar un nuevo aspecto a las emisiones de la Francia al fin liberada.
Charles Mazelin contribuyó con el diseño de su Cérès, grabado en relieve por Henri
Cortot.
La mala impresión tipográfica de esta Cérès grabada por Cortot y el
éxito inmediato y rotundo de la Marianne de Gandon, han desdibujado con el
tiempo la gran concepción de Mazelin. Años después, Mazelin contaba que «Gandon, René Cottet,
Cortot y otros artistas recibimos al mismo tiempo el encargo de diseñar algunas
cabezas que simbolizaran la República, y al final sólo una de las que presenté
fue seleccionada, aunque mi Cérès, en tipografía, pierde mucho de su garbo,
como es lógico» (Charles Mazelin, le «timbré» de gravure; actu.fr). Cortot, igualmente, llegó
a grabar en relieve otro de los diseños de Mazelin, una cabeza republicana de
perfil que, por el gorro frigio que lleva, es más una Marianne que una Cérès.
Francia, 1945-47, Cérès como representación simbólica de la República. Diseño original de Charles Mazelin, a la
izquierda, y uno de los valores tipográficos que grabó en relieve Henri Cortot.
A la derecha, la Marianne de su amigo Gandon grabada en una viñeta de 1949 por
Charles Mazelin, a partir de una litografía de J.
Carré; impresión en calcografía
Francia, 1945, Liberación.
A la izquierda, prueba de grabado de Charles Mazelin sobre un diseño finalmente
descartado de Paul Pierre Lemagny. En el centro, el sello finalmente emitido,
diseñado y grabado por Pierre Gandon; impresión en calcografía. Y a la derecha, otro de los grandes
sellos de posguerra grabados por Charles Mazelin, basílica de Nuestra Señora del Puerto en Clermont-Ferrand; calcografía. Imagen
de este último sello procedente de Wikitimbres.fr
En 1942, al año siguiente de debutar en las
emisiones metropolitanas, Charles Mazelin comenzó a publicar sellos
dentro del extrarradio de la filatelia francesa, en Mónaco y varias
colonias africanas, abriendo un filón que habría de ser con el tiempo
considerable y brillante.
Sellos coloniales grabados por Charles Mazelin, para
el África Occidental Francesa (1947; danza de los fusiles en Trarza, Mauritania)
y Argelia, 1953 (a favor de obras sociales del ejército) y 1954 (a favor de las
víctimas del terremoto de Orléansville -Chlef hoy- y su región, 2 valores), con diseños del
propio autor los dos primeros y de M. Racim, a la derecha. Impresión en calcografía. Imágenes procedentes de Wikitimbres.fr
Mónaco, 1946, Bienestar infantil (sello sobretasado) y
Príncipe Luis II de Mónaco, en la serie formada por el sello especial para los
dos valores más altos, de los que se expone uno en el centro sobre estas
líneas, y por un sello sencillo emitido en diversos valores básicos entre 1946
y 1949, a la derecha. Sellos grabados por Charles Mazelin, autor también de los
diseños, excepto del primero, obra de Pierre Gandon. Impresión en calcografía
Pareciera para el profano que los márgenes de la filatelia francesa son secundarios y sin trascendencia, pero lo cierto es que, más que de un conjunto, cabe hablar de pequeños paraísos del sello artístico, la mayoría, eso sí, abismados en París.
África Occidental Francesa, 1947, Transporte de burros en Senegal y llegada de vagones en Dakar. Sellos diseñados y
grabados por Charles Mazelin. Impresión en calcografía
En muchos de estos sellos coloniales, Charles
Mazelin, como paralelamente en Saar, alcanzó cotas artísticas muy elevadas, a
veces con diseños propios y en otras exhibiciones puliendo sobre el acero las concepciones ajenas.
Sellos grabados por Mazelin para Marruecos, ambos
emitidos en 1953: Día del Sello, a la izquierda, diseñado por Edmond Valès, y Caballería
ligera en el norte de África, este último con diseño de Alexandre Delpy, que
utiliza un pequeño fragmento de una escena de la Columna de Trajano en Roma. A
la derecha, el sello de Mónaco de la serie de Santa Devota que en 1944 grabó
Mazelin, previo diseño de Pierre Gandon. Impresión de los tres sellos en
calcografía
Sin duda en esta década de los años
cincuenta, por la variedad de temas, la categoría de los grabados y la
prolijidad incesante y vigorosa, Charles Mazelin estaba en plena y sostenida ebullición
artística dentro de los dominios extensos de la filatelia francesa.
Marruecos y Francia, 1954, Día del Sello y 150
aniversario de la creación de la Escuela Especial Militar de Saint-Cyr. Sellos grabados por Charles Mazelin, el francés de
concepción propia, y el de Marruecos diseñado por Alexandre Delpy. Impresión en calcografía
Charles
Mazelin dejaba su huella de orfebre meticuloso en todo tipo de grabados, fueran escenas
costumbristas, momentos históricos o composiciones simbólicas, pero la
preferencia del artista se inclinaba claramente hacia los retratos.
Francia, 1953, 1956 y 1957, Jules Michelet, Guillaume
Budé y Félicité Robert de Lamennais.
Sellos grabados por Charles Mazelin, diseñador asimismo de dos de los sellos,
encargándose Paul Pierre Lemagny de la concepción del dedicado a Budé. Impresión
en calcografía. Imágenes procedentes de Wikitimbres.fr
Qué palabras en el acero tan sutiles y meditadas ahonda Charles Mazelin en los retratos, confesiones casi sentimentales, con depresiones no obstante de una locuacidad muy intensa y franca. Sublime el maestro francés.
Preguntado en una entrevista sobre qué
motivos prefería grabar en un sello, descontados los retratos, Charles Mazelin
contestó que quizá las vistas a media distancia.
No dejó Mazelin apenas ejemplos, sin embargo,
en la recreación de pinturas, excepción hecha de los retratos y primeros planos
que tenían su origen en pinceles del pasado, tal como en las emisiones presentadas
de Francia y de Saar, pero sí que esculpió con los buriles alguna fotografía
imposible, así en un gran sello de la Polinesia Francesa de 1958, perteneciente
además a una emisión espléndida donde Gandon y Pheulpin versionaron obras
de Paul Gauguin. Cincuenta años después y para un sello conmemorativo,
André Lavergne grabó otra vez, ahora con mayor liviandad, el diseño incitante
de Charles Mazelin adaptado por Luc Dartois.
Francia, 1957 y 1958, Auguste Comte, Miguel Ángel y Denis Diderot.
Sellos grabados por Charles Mazelin, con diseños del propio artista y de Maurice
Lalau (Miguel Ángel). Impresión en calcografía
Francia, 1946 y 1957, Rocamadour y Beynac-et-Cazenac. Sellos diseñados y grabados por Charles Mazelin; calcografía.
A la derecha, sello de las cataratas de Boali emitido por la República
Centroafricana en 1963, diseñado y grabado por Mazelin; impresión en calcografía. Imágenes de los sellos de Francia procedentes de
Wikitimbres.fr
A la izquierda, la fotografía
utilizada en el diseño por Charles Mazelin para el sello de la Polinesia
Francesa de 1958, situado de inmediato y en el que podemos ver a un joven
artesano del nácar; impresión en calcografía. A la derecha, el mismo diseño adaptado por Luc dartois (París, 1970-) y grabado por André Lavergne en el sello conmemorativo de la Polinesia Francesa emitido en 2008; impresión en calcografía
Los sellos grabados de la Polinesia Francesa
tienen un toque muy exclusivo, y no necesaria ni solamente por el exotismo
natural de los motivos y temas, sino que parece que los artistas llamados vislumbraron
un espacio de ensueño donde practicar el arte de la belleza súbita y
vertiginosa.
Bellas nativas de la Polinesia Francesa grabadas
por Charles Mazelin en estos sellos emitidos 1958 (4 valores) y 1964 (2), el
primero con diseño del propio artista a partir de la fotografía adjunta, y el
segundo concebido por su colega Raoul Serres. Impresión de ambos sellos en
calcografía
Laos, 1963, 1964 y 1966, Cosecha del arroz, Mujeres
de Laos y Procesión de la Pagoda de Cera (Ritos y costumbres). Sellos diseñados
por Chamnane Prisayane, Thao
Tuan
y Sa-Nguan Rodboon, respectivamente, y grabados por Charles Mazelin.
Impresión en calcografía
Con su estilo ecuánime y pasimonioso, Charles
Mazelin no tenía ningún problema en adaptarse a los ademanes más personales de
los diseñadores, así fueran muy enfáticos como las revelaciones instintivas de
Albert Decaris, artista exaltado y extremoso.
Mazelin grabó envites de los mejores
diseñores del sello francés de su época, de los maestros como Lemagny, Spitz y
el mismo Decaris, pero también de algún que otro joven talento entonces balbuciente
como Pierrette Lambert.
A la izquierda sobre estas palabras,
dos sellos diseñados por Albert Decaris y grabados por Charles Mazelin,
emitidos por Marruecos en 1960 para celebrar los juegos Olímpicos de Roma;
calcografía. Esta serie marroquí constó de 8 sellos, diseñados todos por Decaris,
que además grabó 3; Gandon, Miermont y Durrens incidieron los restantes. Y a la
derecha, sellos emitidos por Argelia en 1946 (Solidaridad argelina) y Túnez en 1961 (Fiesta Nacional), diseñados por
F. Fauck y Ammar Farhat respectivamente, y grabados por Charles Mazelin; impresión en calcografía (imagen del sello argelino procedente de Wikitimbres.fr)
Charles Mazelin grabó dos de los diez sellos de la
fastuosa serie de pájaros emitida por Mónaco en 1962 que diseñó Pierrette
Lambert, que con el tiempo terminó siendo una de las grandes artistas del sello
francés; calcografía. A la derecha, retrato de Eisenhower grabado por Mazelin
unos años antes, en 1956 (Mónaco), con diseño de Pierre Gandon; calcografía
Grabador genial, diseñador grande
Francia, 1960, Michel
de l’Hospital y Henri de la Tour d’Auvergne. Sellos diseñados por Charles Mazelin y grabados por Robert Cami y Pierre Munier; impresión en calcografía. Imágenes procedentes de Wikitimbres.fr
A principios de los años sesenta, Charles
Mazelin dirigió dos grandes series francesas de personalidades, grabando además
varios de los sellos.
Francia, 1960, Nicolas
Boileau y Jean-Martin Charcot. Sellos diseñados por Charles Mazelin y grabados por el
propio artista y por Claude Durrens; impresión en calcografía. Imágenes procedentes de Wikitimbres.fr
Sobre formato apaisado, los diseños no pueden ser más armoniosos y lúcidos,
y encuentran su justa correspondencia en unos grabados cautivadores.
Francia, 1960, Georges
Bizet y Edgar Degas. Sellos diseñados por Charles Mazelin y grabados
por Jacques Combet y Claude Hertenberger; impresión en calcografía. Imágenes
procedentes de Wikitimbres.fr
Formadas por 6 sellos calcográficos cada una,
Charles Mazelin dispuso todos los diseños y grabó sólo tres, uno en la primera
de 1960 y dos más en la serie del año siguiente.
Francia, 1961, Charles-Augustin de Coulomb y Antoine Drouot. Sellos diseñados por Charles Mazelin y grabados por Jacques
Combet y Claude Durrens. Impresión en calcografía
Varios grabadores se encargaron de incidir los otros nueve sellos. Sólo
Claude Durrens y Jacques Combet participaron en las dos series, grabando un solo
sello en cada una.
Francia, 1961, Guillaume
Apollinaire y Pierre Puget. Sellos diseñados y grabados por Charles Mazelin.
Calcografía
Francia, 1961, Honoré
Daumier.
Sello diseñado por Charles Mazelin, cuya concepción original se puede ver en la
imagen de la izquierda, y grabado por Georges Bétemps. Impresión en alcografía
Francia, 1961, Bertrand
du Guesclin.
Sello diseñado por Charles Mazelin y grabado por Jean Pheulpin; calcografía. A
la derecha, sello de Blaise Pascal que grabó Charles Mazelin en 1962 (Francia) tras
el diseño liviano de Roger Schardner; calcografía
La relación de Charles Mazelin con Pierre Gandon
no decayó ni sufrió merma a lo largo de los años, y ambos artistas compartieron
más de una vez autoría en los sellos. En 1960, y para la primera serie
metropolitana de Francia impresa en rotativa de 6 colores (Leoncio Mayo, La
calcografía, arte del grabado en los sellos de correos), Mazelin grabó uno de
los cuatro diseños de Gandon.
Francia, 1960, Estudio de
las migraciones, Museo de París, Vanneau Huppé (Vanellus
vanellus, avefría europea). Sello diseñado por Pierre Gandon y
grabado por Charles Mazelin; calcografía. A la derecha, sello de Francia
emitido en este mismo año de 1960, Valle del Sioule, diseñado y grabado por
Mazelin; calcografía. Imágenes procedentes de Wikitimbres.fr
Los sellos de aves eran muy estimados por Pierre Gandon, y mucho tenía que apreciar a Mazelin para haber cedido el grabado de
algunos al amigo querido. Gandon no sólo concedió a Mazelin uno de los sellos
de la serie referida de 1960, sino que también en 1955, a propósito de la emisión
emblemática de Mónaco de correo aéreo, requirió la participación del colega,
así como en varias ocasiones más.
Oportunidades hubo, además, en que
cicunstancialmente Mazelin y Gandon grabaron sellos de una misma serie sin ser
ninguno el diseñador general, tal como en la emisión de Mónaco que en 1958 celebró
el centenario de la aparición de la Virgen María en Lourdes.
El Museo Oceanográfico de Mónaco ha tenido
grandes calibraciones en la filatelia del Principado. Charles Mazelin grabó dos
sellos en la serie que en 1960 conmemoró el cincuentenario de su inauguración.
Merced a la amplitud de dominios coloniales, a las
cuidadas impresiones y a los muchos grabadores y diseñadores implicados, no
hay ninguna filatelia en el mundo que haya tenido tantos compartimentos
artísticos como la francesa. Y por si todo esto fuera poco, está además el
Pincipado de Mónaco, donde no parece sino que sólo la belleza por la belleza es
la divisa única y obligada de sus sellos.
La profusión de sellos coloniales de estirpe francesa fue
tan grande por momentos, que incluso algunos grabadores se
especializaron en determinados personajes, como ahora Mazelin con Winston Churchill,
y después Lacaque con Schweitzer
o Claude Haley con Hansen.
¿Qué pensaría Charles Mazelin en sus últimos
años de vida, cuando proseguía grabando sellos con ímpetu y alegría? Llegó con
casi 60 años al mundo del sello grabado, y sobrepasados los ochenta aquí
seguía, feliz y tranquilo.
A la izquierda, uno de los cuatro sellos de aves
de correo aéreo (gaviotas) emitidos por Mónaco en 1955, diseñado por Pierre
Gandon y grabado por Charles Mazelin; calcografía. Y a la derecha, otro de los
sellos de Mónaco que diseñó Gandon y grabó Mazelin, el triangular de Franklin
D. Roosevelt, emitido en 1946 en memoria del Presidente norteamericano;
calcografía. Charles-Paul Dufresne grabó el mismo diseño de este retrato de
Roosevelt en el otro sello triangular de la emisión del Principado (correo aéreo), así como, diez años después,
Jean Miermont lo incidió sobre uno de los sellos monegasco de Fipex. En las
emisiones de Mónaco, y entre otras colaboraciones, Mazelin participó asimismo
en la serie de 1948 dedicada a François J. Bosio y diseñada por Gandon,
grabando el sello de Hyacinthe
Mónaco, 1958, Centenario de la aparición de la
Virgen María en Lourdes. Serie formada por 13 sellos de los que Charles Mazelin
grabó estos dos, el de la cueva vacía en Lourdes y la gruta con estatua y
altar, ambos sobre diseños a tinta del artista Paul Jouve (1878-1973); impresión en calcografía. En esta
serie de Mónaco llegaron a participar hata 11 grabadores distintos, y sólo
Gandon y Mazelin surcaron dos sellos cada uno
Mónaco, 1960, 50 aniversario de la inauguración
del Museo Oceanográfico del Principado de Mónaco. Sellos grabados por Charles Mazelin, diseñador de uno
de ellos, siendo el otro dispensado por André Spitz. Impresión en calcografía
Dahomey (1964, Unicef), República del Congo (1967, Mahatma Gandhi) y Mónaco (1961, Orden
de Malta). Sellos grabados por Charles Mazelin, diseñador asimismo del sello de
Mónaco. Los sellos africanos fueron diseñados por Pierre Gandon y André Spitz. Impresión en calcografía
Mali y Chad (1965), y Alto Volta (1966), Winston Churchill. Sellos
grabados por Charles Mazelin, con diseños de André Spitz (2) y Pierret Lambert. Impresión en calcografía
Francia y Costa Francesa de Somalia, 1962 y 1963, Puente
Valentré en Cahors y Caravana
de salineros en el Lago Assal. Sellos grabados por Charles Mazelin, con diseño
del sello africano obra de C. Robin; impresión en calcografía. Imagen del sello de Cahors
procedente de Wikitimbres.fr
El artista murió a los 86 años en París, el
21 de agosto de 1968, con los buriles cerca para seguir grabando sellos, esa
tarea que tres décadas antes había enfrentado como un reto que entonces creyó
anecdótico y pasajero. Por suerte Charles Mazelin quedó hechizado dentro del espacio
infinito de un sello, y gracias a ello, y a su talento y dedicación, hoy
tenemos entre las manos anhelosas un puñado de pequeños tragaluces, bellos y
misteriosos.
Francia, 1962, 1963 y 1964, Laval, Abadía de Saint-Pierre de Moissac y
Papa Silvestre II. Sellos grabados por Charles Mazelin, con diseños del propio
artista y de André Spitz; calcografía (imágenes procedentes de Wikitimbres.fr). Y a la derecha, último sello de los emitidos por Francia que grabó Charles Mazelin, recordando en el centenario de su nacimiento al compositor Paul Dukas (1965), diseñado por René Cottet y con sobretasa a favor de la Cruz Roja; calcografía. En los dos años siguientes (1966 y 1967) se emitieron varios sellos coloniales más que fueron grabados por Mazelin