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| Engelien Reitsma-Valença, autorretrato a lápiz de 1914 |
Aunque sólo estuve unos meses allí, siempre he vivido en Italia...
Engelien Reitsma-Valença
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Si bien progresiva y paulatinamente las mujeres han ido adentrándose durante las últimas décadas en el ámbito huraño y difícil del diseño y grabado filatélicos, en los años veinte y treinta del siglo pasado no era tan habitual encontrar a una artista implicada en la confección de un sello.
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La gran artista neerlandesa Engelien Reitsma-Valença fue una de estas
excepciones. Nació esta mujer dotada y afectiva el 3 de mayo de 1889 en Amsterdam. Su padre
era cortador de diamantes, y esta actividad de su progenitor determinaría
enseguida y primeramente, su impulso resuelto hacia la expresividad artística,
y no es difícil ver en esa artesanía excitante y minuciosa el embrión incisivo
de la futura destreza de Engelien con
los buriles.
Siendo ya
una adolescente, los profesores de dibujo que tutelaban su genio incipiente en
una pequeña escuela de arte local, hicieron todas las gestiones necesarias para
que la joven completase su formación en la prestigiosa Rijksakademie van beeldende kunsten, institución a
la que finalmente accedió en 1906 y
donde Engelien recibió una educación esmerada durante
los años siguientes.
Formada y con talento, Engelien fue
becada y viajó a Roma, a indagar a fondo el misterio
y la belleza del arte más elevado de la antigüedad. Como en Goethe y en tantos otros artistas y
escritores, Italia dejó una huella
profunda en la sensibilidad dolorida de esta joven alegre y curiosa, y a lo
largo de su vida volvería una y otra vez en su obra a los recuerdos de Roma, en los que siempre dijo respirar y sentir.
Retrato del Dr. Gisbert Brom, grabado
de 1914, 22 x 26 cm
Con sólo 25 años, Engelien ya era una artista confiada y ambiciosa, alumna
aventajada de Pieter Dupont y con una
obra muy apreciable y conocida en Amsterdam, especialmente en
el área difícil del grabado.
El extraordinario retrato a buril del Dr. Gisbert Brom, a la derecha de estas palabras, está fechado en 1914, por lo que no es
extraño que trece años después la Casa Enschedé, inducida por Jean François van Royen, contactara con
ella y le propusiera sus primeros grabados para unos sellos que conmemoraban el
sesenta aniversario de la Cruz Roja neerlandesa.
Y es que además Engelien había
recibido también primero las lecciones y después los elogios del más famoso
artista filatélico neerlandés del momento, el profesor Johannes Josephus Aarts (1871-1934),
el grabador de la hoy mítica serie del Centenario de 1913.
Países Bajos,
1937, François de le Boë Sylvius, anatomista y científico; diseño y
grabado de Engelien Reitsma-Valença; calcografía. En primera instancia sobre
estas líneas, estudio de la artista para el grabado del retrato
de Boë Sylvius, lápiz sobre papel, 24 x 21.5 cm; y en el centro, el diseño definitivo de Reitsma-Valença de este sello; lápiz y carboncillo, 26.2 x 21.4 cm
A partir de entonces y durante veinte años, Reitsma-Valença participó en el diseño y
grabado de varios sellos, aunque lo cierto es que su obra filatélica es escasa,
pero como por otra parte lo es también la obra de la mayoría de grabadores
neerlandeses de la época, pues las emisiones calcográficas, norma general
durante la primera parte del siglo pasado, fueron paulatinamente desapareciendo
durante la segunda parte de la centuria en las emisiones de los Países
Bajos.
No obstante, Reitsma-Valença prosiguió,
ya fuera del ámbito filatélico, realizando grabados de todo tipo, desde
retratos a paisajes, pasando por la ilustración de libros o la confección de
exlibris, en los que era una verdadera especialista.
Retrato a buril de
Gustave Flaubert, 11 x 8 cm, año 1936. Este grabado, realizado por Engelien en
cobre, ilustraría en 1948 un libro de Flaubert, "Lettres à Mme
X...1846-1847"
El grabado que aparece a
la derecha de estas palabras es una maravilla, exquisitamente delicado y
envuelto en una bruma de poesía íntima y sincera. Es Flaubert, el
artista de los artistas, y pareciera que lánguido y transido de su Emma
Bovary, acaso una bella y velada concreción con los buriles de la
confidencia intrépida y feliz del gran escritor normando, Madame Bovary
c'est moi…
La bella
y sensible Engelien Reitsma-Valença, que se casó con Jacobus Reitsma en 1917 y tuvo tres
hijos, falleció el 11 de julio de 1981 en Doorn, un
pueblecito situado en la provincia de Utrecht. En su obituario se decía que Engelien vivió para el arte y para su familia...
Países
Bajos, 1940, 1941 y 1947, Everhardus Johannes Potgieter, Aagje Deken y Jean François van Royen (1878–1942). Sellos
diseñados y grabados por Reitsma-Valença,
de la que exponemos uno de los bocetos a lápiz para el sello de Deken.
Calografía
Países Bajos, 1927. Serie de la Cruz Roja
Vamos a
ver en este primer anexo los sellos aurorales diseñados por Engelien Reitsma-Valença para las emisiones de los Países Bajos, y
de paso mostramos la serie entera, en la que también participaron otros dos
artistas, Debora Geertruida Duyvis y Carel Adolph Lion
Cachet.
Y estuvo implicado asimismo en esta emisión de 1927 sobretasada
a favor de la Cruz Roja neerlandesa, que cumplía su sesenta
aniversario, el profesor Johannes Aarts, pero sus propuestas extrañamente no
terminaron de convencer a las autoridades postales, y entonces Enschedé solicitó
a Engelien unos retratos rápidos para dos de los sellos.
Esos dos
sellos fueron impresos en huecograbado, mientras que el otro sello, que en
realidad es el único que grabó Engelien y que situamos
en primera instancia tras estos párrafos, fue confeccionado en
calcografía. Y no fue una tarea fácil este primer sello grabado para la
artista, pues aunque dotada de un gran talento, Engelien sufrió
como novata las dificultades intrínsecas de la tarea, mucho mayores de lo que
esperaba: muy poco espacio, y la necesidad de no soltar nunca la lupa de la
mano mientras tallaba, aparte de unas formalidades en el diseño demasiado rigurosas
y estrictas.
Fotografía de Johannes Maria Deutmann del
príncipe Hendrik, usada por Engelien para el diseño del sello; uno de los diseños
de la artista para el diseño a lápiz y carboncillo; y el sello emitido, después
del grabado a buril de la propia Reitsma-Valença. Impresión en calcografía
Para el
sello grabado del príncipe Hendrik, cuyo perfil congestionado y
zaragatero no deja de tener cierto aire bufo, Engelien usó
algunas fotografías de Johannes Maria Deutmann, de las que
seleccionamos una de ellas, y realizó muchos bocetos y diseños alternativos,
entre los que ahora escogemos uno como muestra de las diversas y agitadas
deliberaciones de la artista para este su primer sello grabado.
La verdad es que esta emisión de la Cruz Roja
neerlandesa de 1927, fue una serie muy dispar y
heterogénea, tanto en su método de impresión como en la misma y pudiéramos
decir que accidentada confección. Pues han sobrevivido algunos de
los diseños de Johannes Aarts para el sello del rey Willem III (Guillermo III), y no se entiende muy
bien por qué fueron finalmente rechazados. Engelien Reitsma-Valença,
como para el sello de la reina Wilhelmina,
esbozó un retrato sencillo y formal de Willem III y su
dibujo fue al cabo impreso en huecograbado.
Sellos
de los Países Bajos emitidos en 1927 del rey Willem III y de la reina Wilhelmina, impresos
en huecograbado ambos y diseñados por Reitsma-Valença
De los
sellos restantes de la emisión se encargaron Debora Geertruida Duyvis
(1886-1974), que diseñó y grabó el sello de la reina madre Emma, y
el artista Carel Adolph Lion Cachet (1864-1945), que creó una
bella acuarela para el valor de mayor facial. Lion Cachet ya había
diseñado un sello para una serie específica de seguros que se emitió unos años
antes (1921), e incluso se encargó de la concepción de un billete de 500
florines apenas tres años después (1930), mientras que Duyvis tuvo algún problema con su grabado y hasta
solicitó a Hendrik Seegers el
hombre de confianza de Enschedé,
permiso para repetir la talla. Seegers la disuadió, y al final el
grabado de Duyvis, anguloso y realzado por un excelente diseño,
fue emitido junto con el resto de la serie en junio de 1927.
Países Bajos, 1927, Cruz Roja. Sellos diseñados
por Carel Adolph Lion Cachet (1864-1945),
en primera instancia a la izquierda (huecograbado), y de la reina madre Emma (calcografía), diseñado y grabado por Debora
Geertruida Duyvis, de la que exponemos uno de los diseños preliminares a lápiz
Epílogo febril
Y terminamos con Engelien Reitsma-Valença exponiendo dos de sus mejores sellos, ambos pertenecientes a las series sociales sobretasadas de los Países Bajos en las que más y mejor exploró y probó su talento.
Y terminamos con Engelien Reitsma-Valença exponiendo dos de sus mejores sellos, ambos pertenecientes a las series sociales sobretasadas de los Países Bajos en las que más y mejor exploró y probó su talento.
Así, y
por debajo de estas palabras, exponemos un retrato impulsivo y febril de Reitsma-Valença
del teólogo y político Aritius Sybrandus Talma (1864-1916), emitido en 1936.
Países Bajos, 1936.
Aritius Sybrandus Talma (1864-1916), teólogo y político. Diseño y grabado de
Engelien Reitsma-Valença. A la izquierda, retrato a lápiz y carboncillo de
Reitsma-Valença de este sello de Sybrandus Talma
El otro sello es un
retrato del gran poeta del siglo de oro holandés, Joost van den Vondel, nacido sin embargo en
Colonia en 1587. Y el mismo año en que se emitió este sello formando parte de
la preceptiva serie de personalidades (1937), ejecutó Reitsma-Valença un retrato
extrafilatélico imperioso y magistral. Ahora, viendo uno y otro retrato con
sosiego, por debajo de estas palabras, percibimos rápido y de una sola vez la
síntesis forzosa a que obliga el espacio claustrofóbico del sello, en el
que Engelien ha de compendiar y
endurecer sin más remedio. Admirable Engelien.
Sello emitido en 1937 de Joost van den Vondel, diseñado y grabado por
Reitsma-Valença; calcografía. A la izquierda, el diseño de Reitsma-Valença
para este sello del poeta; lápiz y carboncillo, 28 x 15 cm. A la
derecha, retrato de Joost van den Vondel (1587-1669) del año 1937, grabado en
cobre (14 x 11 cm) por Reitsma-Valença
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